¿Cómo preparo mi tejado y mi fachada para el invierno? Inspección, limpieza e impermeabilización

El invierno es una época en la que el tejado y la fachada de su casa tienen que enfrentarse a condiciones climáticas difíciles: desde heladas y nevadas hasta cambios bruscos de temperatura. ¿Cómo prepararse para ello?

Empecemos por el hecho de que descuidar la preparación adecuada del tejado y la fachada puede provocar graves daños. A menudo, éstos no se manifiestan hasta la primavera, cuando ya es demasiado tarde para repararlos. Por lo tanto, merece la pena ocuparse con antelación de inspeccionar, limpiar a fondo e impermeabilizar el tejado y la fachada.

En este artículo, le daremos consejos sobre cómo preparar su casa para el próximo invierno en unos pocos pasos para evitar gastos innecesarios y disfrutar de tranquilidad durante toda la temporada.

Inspección del tejado y la fachada antes del invierno

Antes del invierno, es conveniente realizar una inspección exhaustiva del tejado y la fachada. Así se asegurará de que su edificio está preparado para las próximas heladas y precipitaciones.

El primer paso es comprobar si hay goteras en el tejado. Para ello, busque fugas, grietas o daños que puedan provocar goteras durante el invierno. El tejado debe inspeccionarse a fondo, sobre todo en las juntas y alrededor de las chimeneas. También hay que prestar especial atención a los tapajuntas, que tienen una función clave en el drenaje del agua y su estado repercute directamente en la protección de la cubierta frente a la humedad invernal y la nieve fundida. Si hay que reparar o sustituir la cubierta, ondulín para el tejado puede ayudar .

Además del tejado, también debe analizarse el estado de los canalones y la fachada. Los canalones son cruciales para drenar el agua de lluvia y el deshielo, y unos canalones obstruidos o dañados pueden provocar inundaciones en los cimientos y debilitar la estructura de la fachada. Asegúrese de que sus canalones están libres de hojas, ramas y otros residuos que puedan bloquear el flujo de agua. Una inspección de la fachada le permitirá identificar rápidamente cavidades o grietas que pueden verse agravadas por las heladas y la humedad. Las inspecciones periódicas evitarán reparaciones costosas y garantizarán que toda la estructura sobreviva al invierno sin daños.

Limpieza y protección del tejado y la fachada

Limpiar las superficies del tejado y la fachada es un paso clave en la preparación para el invierno. Permite eliminar los contaminantes que pueden provocar daños graves en épocas de bajas temperaturas y mayor humedad.

Conviene empezar por eliminar el musgo, los líquenes y las hojas. Éstos se acumulan en los tejados y canalones y atrapan la humedad, lo que favorece la corrosión y degradación de la cubierta.

La limpieza regular de los tejados no sólo mejora su aspecto, sino que también favorece su impermeabilizaciónduradera como barrera contra el agua de lluvia.

Para la limpieza, lo mejor es utilizar detergentes suaves que no dañen la superficie ni la estructura de las tejas, chapas u onduline. Al garantizar una protección adecuada contra la humedad y la eliminación de la suciedad, se reduce considerablemente el riesgo de debilitar el tejado y la fachada durante los meses de invierno.

Impermeabilización: la clave para un rendimiento duradero del tejado y la fachada en los meses deinvierno

Vale la pena recordar que la impregnación es el último paso, pero extremadamente importante, en la preparación para el invierno. La elección correcta de la impregnación protege la superficie de la humedad, creando una barrera que impide que el agua penetre en las tejas, la fachada o las piedras decorativas. Este tipo de protección no sólo minimiza el riesgo de daños por heladas, sino que también contribuye a mantener un aspecto estéticamente agradable durante más tiempo. La impermeabilización, realizada antes de la llegada de las bajas temperaturas, evita costosas reparaciones y garantiza que la casa siga siendo resistente a las duras condiciones invernales.

ARTÍCULO PATROCINADO