El edificio futurista fue diseñado por Zaha Hadid Architects. El Museo de Ciencia y Tecnología de Shenzhen (China) es una instalación concebida para promover los logros tecnológicos y científicos del país y servir de escaparate arquitectónico de la ciudad.
El punto central del establecimiento es un volumen sólido y esférico que se asoma a la ciudad al tiempo que marca la esquina sureste del recién desarrollado Parque Científico. El espacio del edificio fluye a la perfección hacia una serie de terrazas dinámicas que se extienden hacia el oeste, hacia las plazas verdes. Estas terrazas funcionan no sólo como una extensión estéticamente agradable de los interiores del museo, sino también como lugares de descanso para los visitantes, creando una nueva dimensión del espacio urbano.
El interior del edificio tiene un atrio central del que surgen las galerías de exposición: algunas se elevan directamente del suelo y las paredes, otras parecen flotar sobre el espacio, abriendo perspectivas inesperadas. Este concepto encaja perfectamente con la filosofía de diseño de Zaha Hadid Architects, que no sólo muestra formas futuristas, sino que también guía intuitivamente a los visitantes por un laberinto de espacios interconectados.
Un edificio como una exposición
En el proceso de diseño del museo se utilizaron avanzadas simulaciones por ordenador para optimizar la forma del edificio, la distribución espacial y la fachada en el contexto de las cambiantes condiciones climáticas de Shenzhen. Mediante un análisis preciso de la radiación solar, la temperatura, la humedad, la velocidad del viento y la calidad del aire, se determinó la orientación del edificio para minimizar la acumulación de calor en el atrio central y mantener al mismo tiempo vistas panorámicas del parque circundante.

Las soluciones de fachada incluyen el uso de la innovadora tecnología de doble color de INCO. Se trata de un proceso especial que ha creado una capa de óxido a nanoescala en la superficie del acero, creando un revestimiento autolimpiante y autoprotector. La elegante gradación de colores, que van del azul intenso a varios tonos de gris, recuerda los movimientos de los cuerpos celestes que orbitan alrededor de sus estrellas centrales.
El Museo de Ciencia y Tecnología de Shenzhen como espacio para el diálogo y la innovación
El Museo de Ciencia y Tecnología de Shenzhen se diseñó pensando en la colaboración, no sólo entre la industria tecnológica, las universidades y las instituciones de investigación, sino sobre todo como lugar de inspiración para los amantes de la ciencia y el arte. Con nada menos que 128.276 metros cuadrados, el edificio combina galerías de exposiciones permanentes y temporales, cines, teatros, laboratorios de investigación, espacios educativos y un centro de innovación. Esto hace del museo no sólo un refugio para los entusiastas de los últimos descubrimientos, sino también un centro cultural moderno y vibrante que atrae a los residentes de una de las mayores metrópolis del mundo.
diseño: Zaha Hadid Architects
fotografía: Virgile Simon Bertrand
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