Hasta hace poco, alquilar un piso en Polonia estaba asociado a la mediocridad, es decir, a muebles viejos y una cocina desgastada. Hoy, las expectativas de los inquilinos, que ya no buscan sólo comodidad sino también estilo, van en aumento. La tendencia a «estetizar el alquiler», muy conocida en Occidente, también está ganando popularidad aquí. En respuesta a este fenómeno, los propietarios invierten cada vez más en un diseño cuidado. Este fue el caso del local de dos plantas de Aleja Solidarności, en Varsovia, que los inversores encargaron a Monika Michałowska. Querían que la arquitecta creara para ellos un piso elegante, lleno de materiales naturales, que respondiera a las necesidades de unos inquilinos exigentes.
Salón con cocina en un entorno estético
En el salón de planta abierta, llama la atención la cocina, minimalista pero cálida. Sus armarios inferiores están realizados en un tono beige, con fresados verticales, que aportan ligereza y ritmo al conjunto. Los armarios superiores y las estanterías abiertas en roble claro fluyen a la perfección con el resto del piso. La encimera de piedra y el salpicadero de dibujo suave curvado contra la pared añaden un sutil encanto retro a la cocina. El conjunto se complementa con los apliques de pared Arcs Wall Sconce de HAY. El punto focal del espacio es una mesa ovalada rodeada de sillas en tonos canela. Sus líneas suaves y su tejido táctil rompen la austeridad del ambiente de la cocina. Se trata del modelo Ripple de Comforty, diseñado por Krystian Kowalski. Sobre la mesa cuelga la icónica lámpara Flowerpot. La zona de asientos cuenta con un sofá en un tono beige cálido, una alfombra natural y un mueble RTV granate de TYLKO. Este último se distingue por su intenso color, que rompe la tranquila paleta. La pared entre las ventanas está decorada con tres gráficos de Karol Pomykała.
Piso elegante y escalera como una escultura
La escalera, que en un principio iba a ocupar más espacio, se rediseñó por completo. Michałowska redujo y desplazó la escalera, ganando más espacio en el salón y habitaciones adicionales en el primer piso: un cuarto de baño y una habitación que antes eran imposibles de planificar. La nueva forma de la escalera parece una escultura suspendida en el aire. El cálido aluminio lacado en blanco parece una hoja de papel doblada. Bajo la escalera se esconde un práctico armario integrado en el espacio, discreto pero espacioso.
Un sutil juego de texturas e historia en el dormitorio
En la primera planta había un dormitorio pequeño pero cuidadosamente diseñado. Se creó una zona edificada alrededor de la cama para organizar el espacio, creando un marco íntimo para la tranquilidad. El punto focal de la pared es el papel pintado «Seasons by May», de William Morris, con una composición terrosa y floral, que evoca el espíritu de la artesanía inglesa. La cama en marrón oscuro, tapizada en tela bouclé, se complementa con textiles de la sala de exposiciones Conco de Varsovia. A su lado, la mesa de cerámica Oka, diseñada por Maja Ganszyniec, y la cómoda Pastform, que puede utilizarse como tocador. El conjunto, aunque frugal, da la impresión de refinamiento y acogimiento, proporcionando un lugar para la regeneración y la tranquilidad.
Una pequeña oficina en casa con un gran potencial
Una habitación adicional en el primer piso funciona como estudio. La pequeña habitación con ventana a la escalera se ha amueblado pensando en la funcionalidad y la estética. Un escritorio, una librería String y una silla original diseñada por Hałas (restaurada por Sylwia Biegaj) crean una composición que inspira trabajo y concentración. El tapizado en una mezcla de telas hace de este mueble una pieza de acento cómoda y distintiva.
Baños: dos relatos diferentes, un mismo lenguaje
El baño inferior es un espacio de calma. Gres que imita la piedra natural, azulejos de zellige que reflejan la luz y un mueble chapado bajo el lavabo crean un interior de efecto tranquilizador. Aquí, lo que cuenta es el detalle: un espejo ovalado, apliques lechosos y elegantes griferías crean una impresión de armonía. El cuarto de baño superior, aunque mucho más pequeño, no tiene nada que envidiar al inferior. Aquí dominan los colores claros, con acentos de madera oscura y cerámica. Los accesorios negros, como ganchos, estantes y un portapapeles, añaden carácter sin destruir el equilibrio visual. Los materiales utilizados y su disposición demuestran que, incluso en un espacio pequeño, se puede conseguir un efecto sofisticado.
Un hogar elegante que vive
El interior del proyecto de Monika Michałowska no es uno de esos «para mostrar». Aquí, la arquitecta ha creado un espacio que invita a vivir. En él predomina la calidez de los materiales naturales: madera, piedra, cerámica y tejidos. Una paleta de colores serena y homogénea une todas las estancias sin restarles individualidad. Cada detalle ha sido pensado para el confort y la estética.
Fuente: monikamichalowska.com
Fotos: Martyna Rudnicka
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