La reconstrucción de la ruta Lazienkowska en Varsovia es una de las inversiones en infraestructuras más importantes de la capital. La modernización de tramos clave de esta arteria pretende mejorar la seguridad, la comodidad de los desplazamientos y la estética, y adecuar la ruta a las normas modernas. Sin embargo, uno de los principales problemas se ha convertido en las pintadas e inscripciones ilegales, que pueden verse incluso en elementos de las fases aún inacabadas de la inversión. Sin embargo, los garabatos de la Ruta Lazienkowska son sólo la punta del iceberg. ¿Se ocupará la ciudad de estos actos vandálicos?
Viaductos vandalizados antes de su puesta en servicio
Uno de los ejemplos más flagrantes de este fenómeno son los nuevos pasos elevados sobre la rotonda Stanislaw Sedlaczka, cerca del parque Agrykola. Incluso antes de que se encargaran oficialmente, sus superficies estaban cubiertas de inscripciones y pinturas antiestéticas. Las obras de construcción del viaducto norte finalizaron en diciembre de 2022, y para entonces la estructura ya mostraba signos de deterioro. Algo similar ocurrió con el viaducto sur, inaugurado el 31 de octubre de 2023: los vándalos pintaron casi inmediatamente las paredes y columnas de la estructura.
Garabatos en la nueva ruta Lazienkowska: un problema creciente
Las pintadas ilegales no se limitan a los nuevos pasos elevados: el problema afecta a muchas más infraestructuras de la ciudad. La inversión también incluye el acondicionamiento de espacios para peatones y ciclistas. Por desgracia, ya se observa que lugares como muros, barandillas, terraplenes o incluso objetos de pequeña arquitectura se están convirtiendo en blanco de los vándalos. A pesar de los esfuerzos de la ciudad por mantener la limpieza y la estética, las nuevas estructuras se cubren rápidamente de inscripciones y dibujos aleatorios que nada tienen que ver con el arte callejero. Si el vandalismo sigue aumentando a este ritmo, existe un riesgo real de que todas las nuevas infraestructuras pierdan su aspecto estético y renovado en poco tiempo. No se trata sólo de una cuestión estética, sino también de los costes adicionales asociados a la eliminación de pintadas, que podrían destinarse a otras necesidades de la ciudad.
¿Cómo evitar que la inversión sufra más daños?
La Dirección General de Carreteras y las autoridades de Varsovia son conscientes del problema. La ciudad está tomando una serie de medidas para proteger los edificios y las infraestructuras de las pintadas ilegales y combatir el vandalismo. Uno de los programas clave es el plan de la ciudad para combatir los garabatos, inaugurado en julio de 2023. En virtud de él, las pintadas no deseadas se retiran periódicamente de las fachadas de edificios, calles y monumentos. Estas medidas van acompañadas de campañas de educación e información dirigidas a los residentes. Para reducir las pinturas murales ilegales, Varsovia también ha introducido zonas de GRAFFITI GRATUITO, donde los artistas pueden crear legalmente sus obras. Esta iniciativa da cabida a la expresión creativa al tiempo que desincentiva la pintura en zonas no autorizadas. La ciudad también lleva a cabo amplias campañas sociales y educativas. La policía municipal interviene cuando se dañan espacios públicos y organiza clases en los colegios para informar a los jóvenes de las consecuencias legales asociadas a los grafitis ilegales.
Consecuencias jurídicas del vandalismo
En Polonia, pintar grafitis en elementos de la infraestructura urbana se considera un acto de vandalismo y puede acarrear graves consecuencias legales. Si el grafiti no causa daños materiales significativos, se considera un delito menor y se castiga con una multa de hasta 5.000 zlotys, restricción de libertad en forma de servicios a la comunidad u obligación de restituir el objeto a su estado original a expensas propias. Si el valor de los daños supera los 800 zlotys, el acto se tipifica como delito de destrucción de bienes, que puede acarrear una pena de prisión de tres meses a cinco años y la obligación de pagar los gastos de reparación. Además, el autor puede ser detenido por la policía en el momento de cometer el delito o gracias a las grabaciones de vigilancia, y la ciudad o el propietario del edificio pueden solicitar el reembolso de los gastos de eliminación de las pintadas por la vía civil. En caso de condena penal, los antecedentes penales pueden afectar a futuras oportunidades de empleo.
Garabatos en la nueva ruta Lazienkowska: ¿y ahora qué?
A pesar de las diversas medidas y de la amenaza de consecuencias legales, el problema de los garabatos en Varsovia sigue siendo un reto. Las pintadas no deseadas se retiran con regularidad, pero a menudo reaparecen al poco tiempo. Las autoridades de la ciudad buscan constantemente métodos más eficaces para contrarrestar el vandalismo con el fin de garantizar un aspecto estéticamente agradable del espacio público y reducir los costes de la eliminación de pintadas, que ascienden a cientos de miles de zlotys al año. Mientras tanto, prosiguen las obras de reconstrucción de la Ruta Lazienkowska. Además de las etapas ya concluidas, como la renovación del puente Łazienkowski o la modernización de los pasos elevados en los cruces con Wisłostrada y Wał Miedzeszyński, se sigue trabajando en los pasos elevados de Saska Kępa. Su finalización está prevista para mediados de 2025.
Fuente: tvn24.pl, um.warszawa.pl