La transformación de la histórica Torre de Presión Borek de Wrocław en un Fine Spot es la prueba de cómo se puede crear un espacio lleno de sutil elegancia y cultura del vino respetando la historia. El edificio, construido a principios del siglo XX según un diseño de Karl Klimm, ha conservado el espíritu de la arquitectura industrial al tiempo que se ha transformado en un lugar de encuentro para gourmets y amantes del diseño contemporáneo. El equipo de Modelina Architekci es el responsable del nuevo diseño interior.
La función original de la torre, antaño crucial para el sistema de abastecimiento de agua de la ciudad, se convirtió en la inspiración de todo el concepto interior. La construcción de ladrillo en bruto, el suelo original de clinker y la puerta de acero con motivos acuáticos se tomaron como base de una narrativa arquitectónica en la que se funden el pasado y el presente.
Queríamos preservar el carácter del lugar, pero al mismo tiempo dotarlo de una nueva identidad que resonara con su historia. La propia torre nos sugirió soluciones: su austera estructura se convirtió en el punto de partida para construir el interior «, dice Paweł Garus, arquitecto de mode:lina.
Su equipo optó por formas minimalistas y materiales naturales, dejando las paredes en bruto como contrapunto a los sutiles acentos decorativos.
La pieza central del espacio es un bar con cocina abierta, cuya disposición refleja la geometría octogonal del interior. Situados alrededor de las ocho paredes, los asientos proporcionan una sensación de intimidad, al tiempo que dan cabida a grandes degustaciones. Una suave iluminación de portal guía a los invitados por las sucesivas zonas, revelando cada detalle de la composición.
Los materiales y la iluminación se han compuesto para crear un diálogo con la arquitectura de la antigua torre. El intenso color del ladrillo y el cristal armoniza con las tenues superficies de hormigón, mientras que los acentos metálicos aluden al pedigrí industrial del edificio. Los elementos de madera y las formas suaves y redondeadas del mobiliario introducen un ambiente acogedor, equilibrando la austeridad del entorno.
Fine Spot es un lugar donde los clientes pueden descubrir los sabores del vino y la cocina en un espacio que no sólo cuenta una historia, sino que también construye una nueva experiencia «, añade Anita Lupa, coautora del proyecto. Su atención se centra en la atmósfera del interior, que gana profundidad y temperatura gracias a la precisa iluminación.
Los tubos de acero con luz lineal acentúan la dinámica vertical de la torre, subrayando la altura y el ritmo del interior. Los reflejos en las superficies acristaladas introducen un juego de luces que cambia según la hora del día. Un sistema de iluminación compuesto de este modo permite que el ambiente del Fine Spot cambie: de austero y ascético durante el día a cálido e íntimo por la noche.
El Fine Spot de la Torre de Presión de Borek es un ejemplo de la armoniosa adaptación de la arquitectura histórica a las funciones de restauración contemporáneas. Aquí, la austeridad se entrelaza con la elegancia, y el patrimonio arquitectónico del edificio se convierte en un elemento integral que adorna el interior.
diseño: Modelina Architekci
fotografía: Patryk Lewiński
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