El proyecto Prze-pływy de Dagmara Gil y Alicja Hrehorowicz-Nowak obtuvo el primer puesto en el concurso para la recomposición de los alrededores de la colina de Wawel, adjudicado en el marco de la Bienal de Arquitectura Cracovia 2025, celebrada el 11 de octubre de 2025. El objetivo de la edición de este año es seleccionar el mejor proyecto relacionado con la idea de recomponer el lugar clave de la ciudad, que es el entorno de la colina de Wawel.
El proyecto preparado confirma la importancia de un enfoque que trate la colina de Wawel no como un monumento cerrado, sino como una parte dinámica del organismo urbano, capaz de dialogar con el río y los habitantes. El eje central del proyecto es la noción de flujo, entendida tanto literalmente, como relación con el Vístula, como metafóricamente, como movimiento constante de energía, emociones y significados que conforman la identidad de Cracovia.
En lugar de reconstruir el trazado histórico, los autores proponen una interpretación contemporánea de la memoria del lugar, en la que las capas históricas coexisten con las nuevas necesidades sociales. Aquí, el castillo de Wawel se convierte en un punto de contacto, un lugar que combina lo sagrado y lo profano, lo monumental y lo cotidiano.
Principales hipótesis compositivas
El proyecto restablece la relación perdida entre la colina, el río y el tejido urbano mediante un sistema de enlaces visuales, una red de caminos y espacios comunes diseñados. Las intervenciones propuestas son económicas en su forma pero precisas en su función. Su objetivo es abrir el Castillo de Wawel hacia la ciudad, diversificar la experiencia espacial a lo largo del eje colina-Vístula y crear una secuencia de lugares que inciten a prolongar la estancia y a leer la historia en múltiples capas.
Materia y sensación
El lenguaje material del proyecto oscila entre la sutileza y una estructura clara. Las superficies, los elementos paisajísticos y los miradores se han diseñado para realzar los parámetros naturales del lugar y permitir la clara incorporación de funciones contemporáneas sin comprometer el carácter histórico de la colina. Los senderos propuestos tienen diferentes escalas de experiencia: desde paseos íntimos, pasando por senderos educativos, hasta amplios miradores con vistas al Vístula y al perfil de la ciudad.

Dimensión social del proyecto
Overflows trata el espacio público como una herramienta para el recuerdo y la integración. El proyecto prevé sedes de eventos, espacios de reunión y senderos educativos para activar a las comunidades locales y reforzar la relación de los residentes con la colina de Wawel. Las propuestas del programa hacen hincapié en la accesibilidad, la flexibilidad de uso y la apertura a formas estacionales y espontáneas de actividad urbana. El objetivo es animar a los residentes a utilizar la colina de Wawel no como un lugar de paso, como una exposición de museo, sino para detenerse y descansar.
diseño: Dagmara Gil & Alicja Hrehorowicz-Nowak
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