Robert Niedźwiedzki, CC BY-SA 4.0, via Wikimedia Commons

Una obra maestra sagrada de Gdansk. El Altar de Ámbar de la Patria se fabricó con casi una tonelada de materia prima

Desde hace siglos, Polonia es famosa por su riqueza natural: el ámbar. Sus variedades únicas y sus excepcionales propiedades lo han convertido en uno de los símbolos nacionales. Fue este patrimonio nacional el que inspiró la creación de una obra de arte extraordinaria. El Altar de Ámbar de la Patria de la Basílica de Santa Brígida de Gdansk es un proyecto monumental que combina arte, espiritualidad y tradición, rindiendo homenaje a la cultura y la historia polacas.

Ámbar polaco

Durante milenios, Polonia ha estado asociada a dos importantes recursos naturales: la sal y el ámbar. Aunque hoy en día la extracción de sal es un fenómeno mundial, el ámbar sigue siendo la seña de identidad de nuestro país. Los artistas polacos que trabajan con esta materia prima han cosechado importantes éxitos en los mercados internacionales, abasteciendo el 70% de la demanda mundial de joyas de ámbar.

Fotografía de Robert Niedźwiedzki, CC BY-SA 4.0, vía Wikimedia Commons

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El Altar de Ámbar de la Patria: la idea detrás de su creación

En la década de 1990, en una época de dinámicos cambios económicos en Polonia, la comunidad del ámbar de Gdansk tuvo la idea de crear una obra que inmortalizara su potencial artístico y la importancia del ámbar en la cultura polaca. Esta iniciativa contó con el apoyo del padre Henryk Jankowski, entonces párroco de la iglesia de San Brygida. Su idea era construir un altar hecho principalmente de ámbar, que se convertiría en un símbolo de espiritualidad y orgullo nacional.

La construcción del altar

Primera fase de construcción (2000-2003)

La primera fase de las obras comenzó en 2000. El diseñador del altar fue el profesor Stanisław Radwański, antiguo rector de la Academia de Bellas Artes de Gdańsk. La estructura del altar, de 10 metros de ancho y más de 12 metros de alto, se cubrió con una decoración de ámbar que abarcaba una superficie total de 120 metros cuadrados. En el centro se colocó la imagen de «Nuestra Señora – Protectora del Pueblo Trabajador» del padre Franciszek Znaniecki, decorada con un vestido de ámbar. Cabe destacar las coronas de ámbar, financiadas por Lech y Danuta Wałęsa y consagradas por San Juan Pablo II. Estas coronas llevaban incrustados 28 rubíes, símbolo de las víctimas de diciembre de 1970 en Gdańsk. Los elementos de ámbar fueron principalmente responsabilidad de Mariusz Drapikowski, Alicja Pluta y Jakub Kukuryka.

Segunda fase de construcción (2013-2023)

En 2013, bajo la dirección del padre Ludwik Kowalski, las obras del altar entraron en la segunda etapa. Durante este tiempo, se instalaron dos relicarios en forma de cruz, dedicados a San Juan Pablo II y al Beato Padre Jerzy Popieluszko. Sobre el icono de la Madre de Dios se suspendió un águila de ámbar, y debajo se colocó un mapa de contorno de Polonia con la inscripción «Solidaridad». Uno de los elementos más singulares es la custodia de 174 cm de altura, hecha de 34 kg de ámbar, diseñada por Mariusz Drapikowski. Toda la estructura está enriquecida con numerosas cruces que simbolizan acontecimientos importantes de la historia de Polonia, como el Monumento a los Trabajadores Caídos de los Astilleros de 1970 o la cruz de la mina de Wujek, así como elementos que constituyen referencias a las riquezas del país. En el altar se pueden encontrar cultivos de cereales o racimos de fruta.

Robert Niedźwiedzki, CC BY-SA 4.0, via Wikimedia Commons

El Altar de Ámbar de la Patria – simbolismo y significado

El Altar de Ámbar de la Patria es el objeto sagrado más grande del mundo fabricado con esta materia prima, conocida como el Oro del Mar Báltico. Combina las tradiciones artísticas con la espiritualidad nacional, siendo un símbolo de solidaridad, sacrificio y firmeza de la nación polaca. Los diseñadores y artistas ya han utilizado más de 900 kg de ámbar, gran parte del cual procedía de donantes. el 16 de diciembre de 2017 se celebró una ceremonia de dedicación del altar con la participación del nuncio apostólico Salvatore Pennacchio y el presidente Andrzej Duda. Aunque el proyecto aún no está terminado, ya es una obra única de arte sacro y parte integrante del paisaje cultural de Polonia. En junio de 2023, el padre Ludwik Kowalski informó de que la obra estaba terminada en un 50%, y que su avance dependería de la financiación y de la disponibilidad de ámbar.

Fuente: brygida.gdansk. pl, gdansk.pl

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