Una villa como ninguna otra. Una construida en la República Checa

La villa está situada en un barrio de Černošice, cerca de Praga. Su propietario decidió construir la casa en un terreno muy empinado. Aprovechó la pendiente del terreno de una forma poco habitual. En lugar de nivelar el terreno, decidió asentar la casa sobre pilares de hormigón, de modo que la estructura parece estar suspendida sobre un precipicio.

La moderna casa fue diseñada por Ján Stempel y Jan Jakub Tesař, del estudio Stempel & Tesar architekti. El edificio, de una sola planta, tiene 294 metros cuadrados de superficie. El barrio en el que se levanta fue construido a principios del siglo XX. En el barrio hay muchas villas Art Nouveau de la época de la Primera República. Después de 1989, Černošice volvió a ser un lugar popular para la construcción de edificios residenciales representativos. El pueblo empezó a identificarse no por un estilo arquitectónico concreto, sino por la singularidad de los edificios aquí erigidos. Los inversores, en función del grosor de sus carteras, erigían sus casas insignia como muestra de su estatus.

Villa Sidonius (nombre utilizado por los arquitectos para describir el edificio) se construyó en la ladera de una colina. La parcela es una de las más empinadas y altas de los alrededores. La pendiente ofrece muchas ventajas, pero también crea numerosas limitaciones y desafíos. La ventaja de la parcela es sin duda la vista del valle de Berounka, rodeado por las colinas del Karst de Bohemia y la silueta de Praga al fondo. Los arquitectos querían aprovechar estas oportunidades y hacer que la atractiva vista fuera cotidiana para los residentes.

Los diseñadores optaron por un diseño poco habitual. Decidieron asentar la casa sobre pilares, con lo que el edificio se asemeja a una pasarela de acero que descansa sobre una pendiente pronunciada y está ligeramente girada para ofrecer las mejores vistas. Los arquitectos admiten que la casa es un experimento tecnológico, porque en un terreno tan escarpado no se habría construido una casa con métodos tradicionales.

La entrada a la casa se realiza a través de un túnel junto al garaje, que termina en la base de uno de los pilares. Hay un ascensor que lleva a los residentes al nivel habitable. El corazón del edificio es el gran salón, que cuenta con un comedor y una cocina además de la sala de estar. Desde este nivel se accede a la terraza orientada al sur y al jardín. Delante de la casa, incluso se ha podido construir una pequeña piscina.

diseño: Stempel & Tesar architekti – Ján Stempel, Jan Jakub Tesař

fotos: Filip Šlapal, www.filipslapal.cz

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