La finca Przyjaźń, situada en el distrito de Bemowo de Varsovia, se creó en los años 50 como base residencial para los constructores del Palacio de la Cultura y la Ciencia. Única a escala de una ciudad, la finca sirvió a sus residentes durante décadas y fue el hogar de muchos. En mayo de este año expira el actual contrato de arrendamiento, pero según el Ayuntamiento, la finca seguirá utilizándose con fines residenciales y las casas abandonadas se irán renovando sucesivamente. Se trata de una gran oportunidad para los históricos edificios de madera.
La finca Przyjaźń es un complejo de viviendas tipo cuartel situado en Bemowo, en la zona del antiguo pueblo de Jelonki. Se construyó en la década de 1950 y sirvió principalmente a varios miles de albañiles soviéticos del Palacio de Cultura y Ciencia.
La urbanización en los años 60. Fuente: NAC – Archivo Digital Nacional www.nac.gov.pl/, Autor: Zbyszko Siemaszko
En la urbanización se construyeron dos tipos de casas de madera: pabellones hoteleros para los trabajadores y casas unifamiliares para el personal técnico. Se trajeron a Varsovia en elementos prefabricados y se montaron in situ. Se pintaron en dos variantes de color: azul y blanco y azul y rojo, y en su aspecto los pabellones recordaban antiguas casas señoriales polacas. La urbanización también incluía un cine, una cantina, un club, una casa de baños, un centro médico, una sala de calderas y dos campos deportivos. Entre las urbanizaciones se plantaron 4.000 árboles y 40.000 arbustos y se construyeron 8 km de carreteras y calles internas.
En su apogeo, llegaron a vivir en la finca 4.500 personas. Tras la finalización del Palacio de la Cultura y la Ciencia en mayo de 1955, las autoridades municipales cedieron la finca al Ministerio de Educación Superior para que la utilizara como residencia de estudiantes de las universidades de Varsovia. La finca recibió entonces el nombre de Przyjaźń. En una superficie de 32 hectáreas, se construyeron 33 casas para estudiantes, 9 hoteles para asistentes, 19 bloques para asistentes, 77 viviendas unifamiliares para personal universitario y 2 hoteles para trabajadores. A finales de 2023, el Conservador Provincial de Monumentos de Mazovia inició los trámites para inscribir el trazado urbano de la finca Przyjaźń en el registro de monumentos.
Hoy en día, la urbanización Przyjaźń consta de dos partes: los edificios plurifamiliares funcionan como residencias de estudiantes, y las casas unifamiliares están habitadas por universitarios o sus descendientes. El terreno es propiedad del Tesoro Público y lo gestiona el alcalde de Varsovia -como administrador del distrito-. Durante muchos años, la finca Przyjaźń fue arrendada por la Academia de Educación Especial, que gestionaba los asuntos cotidianos de la finca y se encargaba de subarrendar los locales. El actual contrato de arrendamiento expira el 9 de mayo de 2024 y la universidad no estaba interesada en continuar la relación. Por tanto, la propiedad será devuelta por la universidad a la ciudad cuando expire el contrato de arrendamiento.
Residentes, estudiantes y empresarios pueden estar tranquilos. El alcalde de Varsovia, Rafał Trzaskowski, ha decidido conceder ayudas de emergencia a todos, para que ninguno de los residentes sufra cuando venza el contrato de alquiler.
“Queremos que este polígono esté vivo, lleno de residentes, pero también seguro. Ninguno de los residentes del polígono tendrá que desalojar las instalaciones poco después de que la ciudad se haga cargo de la propiedad”, afirma Tomasz Bratek, teniente de alcalde de Varsovia.
Varsovia tiene previsto llevar a cabo una amplia renovación del Polígono Przyjaźń. La intención de las autoridades municipales es devolver a los edificios su antiguo esplendor. Actualmente, sin embargo, el uso de muchos de ellos es imposible. La universidad deja los inmuebles en un pésimo estado de conservación. Muchos de ellos están en ruinas, hay moho en las paredes y los tejados de muchos edificios siguen cubiertos de amianto. También hay que mejorar y reparar las infraestructuras subterráneas. El coste de estas obras se estima en cientos de millones de zlotys.
Una vez que la universidad haya devuelto la propiedad a la ciudad, procederá a una evaluación detallada del estado técnico de las casas. Ya se ha realizado un inventario de las instalaciones subterráneas. En el siguiente paso se determinará el alcance de las obras necesarias. El acondicionamiento se escalonará a lo largo de varios años y dependerá de la financiación externa que se obtenga.
Fuente: um.warszawa.pl
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