Pabellón resplandeciente en medio de un antiguo pueblo de Shenzhen

Para celebrar una antigua tradición, los arquitectos de Hung And Songkittipakdee (HAS) han instalado un pabellón resplandeciente en medio del pueblo histórico. La instalación pretende hacer referencia al árbol simbólico del pueblo hakka que habitaba esta aldea cercada. Hoy, el lugar es un monumento escondido en medio de un moderno distrito de la ciudad de Shenzen, China.

El tema de un pueblo amurallado en una metrópolis moderna es digno de un libro. Desgraciadamente, la supresión de la cultura hakka por los grupos étnicos más grandes de China dificulta la búsqueda de información sobre el asentamiento. Lo que sí se sabe es que los hakka llevan construyendo aldeas fortificadas en el sureste de China desde los inicios del Imperio. Los hakka hablan su propio dialecto, tienen su propia cocina y arquitectura.

El pueblo se fundó probablemente en 1791 y es uno de los mayores asentamientos de este tipo en China. Junto con la aldea se construyó la fastuosa residencia del jefe hakka de la familia Zeng. Las casas del pueblo están interconectadas y son multifamiliares. El punto central del asentamiento es la plaza, que solía ser lugar de reunión y zona de comercio. Era aquí donde la vida bullía y los residentes se reunían para hablar, comprar y vender. Era donde las mujeres vendían e hilaban la seda. Este tejido es uno de los elementos más importantes de la cultura hakka, pero también de la china.

Studio HAS decidió devolver a la plaza su antigua función, aunque de forma simbólica. El pabellón Freeing FrameYard será un punto de encuentro para los turistas que visiten el pueblo. La seda ya no se vende aquí, pero los tubos en forma de hilo simbolizarán esta tradición. En total, se han fijado más de 5.000 tubos a la estructura metálica, creando una sorprendente compilación.

Para los hakka, también pretende ser una referencia visual al platanero. Esta planta es símbolo de prosperidad y se caracteriza por sus ramas tubulares que caen al suelo. Además de simbolismo, la instalación también tiene un uso funcional para el pueblo hakka. El pabellón luminoso formará parte del decorado durante las celebraciones del Año Nuevo Hakka. La instalación puede estrecharse o ensancharse según las necesidades del momento.

Los tubos en forma de hilo iluminan la noche en un pueblo sumido en la oscuridad. Lo hacen de forma estéticamente agradable y añaden encanto a los grises edificios residenciales. Cerca del pabellón hay una estatua del maestro confuciano Zengzi. Los arquitectos querían que la plaza se convirtiera también en un lugar de culto y reflexión.

El pueblo está escondido dentro del nuevo distrito de Pingshan, en Shenzen. En el mapa, aparece como una reliquia del pasado, un monumento olvidado de una cultura olvidada, aislado del tejido moderno. El pabellón del estudio HAS pretende restaurar la memoria de este lugar.

Fuente: HAS Design and Research

Fotos: Yu Bai

Leer también: Arquitectura | Curiosidades | China | Monumento | Lugares, plazas, parques | whiteMAD en Instagram

Últimos contenidos en el sitio

La belleza te rodea