La historia de la Basílica de Las Lajas, en Colombia, está llena de historias de milagros y curaciones. La iglesia neogótica está suspendida sobre el pintoresco cañón del río Guáitara, que fluye cerca de la frontera con Ecuador. El templo y el puente sobre el que se alza la basílica de Las Lajas son impresionantes muestras de ingeniería y arquitectura. Aunque la basílica no se terminó hasta mediados del siglo XX, los orígenes del lugar de culto en el cañón se remontan al siglo XVIII.
La primera capilla del cañón se construyó en 1754 con materiales sencillos, principalmente paja y madera. Estaba destinada a conmemorar un milagro que, según la leyenda, tuvo lugar en una cueva cercana. Según la leyenda, María Mueses de Quinones y su hija sordomuda se escondieron en la cueva de un aguacero. La niña recuperó milagrosamente el habla tras ver una imagen de la Virgen María en la pared de la cueva. Con el tiempo, el lugar se convirtió en punto de peregrinación y se dice que los visitantes de la cueva experimentan recuperaciones igualmente milagrosas.
En el siglo XIX se construyeron en la cueva un pequeño santuario y una capilla. También se creó una cascada artificial junto a ella. Sin embargo, no fue hasta 1916 cuando comenzó la construcción de una basílica en toda regla. La iglesia fue diseñada por Gualberto Pérez y Lucindo Espinosa, arquitecto e ingeniero ecuatorianos. Se construyó un puente de 50 m de altura, con una basílica neogótica de la misma altura. Desde el exterior se aprecian las elevadas torrecillas de los lados y el rosetón del centro. La fachada está decorada con esculturas de ángeles e imágenes de santos. A lo largo del puente se han colocado otras esculturas de ángeles.
La basílica milagrosa
En el interior, llama la atención el retablo de la Virgen María. La pintura representa a la Virgen con Jesús en brazos y a los santos: Francisco y Domingo. La pintura, de autor desconocido, fue ejecutada sobre una roca. La bóveda de crucería estaba decorada con oro. Por otro lado, los ventanales presentan vidrieras del artista italiano Walter Wolf. Curiosamente,“lajas ” en español significa roca sedimentaria, es decir, la roca sobre la que se creó la imagen de la Virgen.
El Papa Pío XII coronó canónicamente la imagen de la Virgen en 1952. Pocos años después, la iglesia fue elevada al rango de basílica menor. Hoy es uno de los santuarios más famosos de Colombia y Ecuador. Numerosos grupos de turistas acuden a la basílica sobre el cañón y, según los informes, todavía hoy se producen curaciones milagrosas. La veracidad de estos sucesos no ha sido comprobada. Sin embargo, existen muchas historias de este tipo.
Fuente: Masterclass
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