En una isla industrial construida al efecto, los daneses han construido un jardín para todo el año. Opera Park es una nueva isla verde en el densamente urbanizado barrio portuario de Copenhague. También cuenta con un pabellón en forma de parque con forma de hoja o flor. Los seis jardines de la isla ocupan una superficie de casi tres campos de fútbol.
Según los diseñadores del estudio danés Cobe, la isla pretende ser un oasis verde, una alternativa a la atestada y ruidosa ciudad. Al parque se accede por tres muelles que conectan la isla con los terrenos de la cercana Ópera Real Danesa. Cabe mencionar que hace 20 años, cuando se estaba terminando la Ópera, los arquitectos no tenían planes concretos para la plataforma del puerto. Ahora esto ha cambiado.
Antes, la plataforma estaba cubierta por una pradera sin urbanizar. Hoy, la isla verde comprende 21.500 metros cuadrados de jardines inspirados en distintas partes del mundo. La superficie del parque incluye jardines temáticos americanos, daneses, nórdicos, orientales e ingleses. Un invernadero en el centro del pabellón esconde un jardín subtropical. En total, hay más de 600 árboles y decenas de miles de arbustos en el parque. En varias partes del parque hay fuentes, estanques y parterres, y el conjunto está surcado por sinuosos senderos.
Los jardines están abiertos a los visitantes todo el año. Según la estación, la vegetación presenta un aspecto diferente. En primavera florecen las flores. En verano, el colorido es aún más evidente. En otoño, numerosos árboles de hoja caduca muestran su color amarillo rojizo. En invierno, en cambio, se pueden observar las coníferas de hoja perenne.
El corazón del parque es el pabellón situado en el centro de la isla. En su interior hay una cafetería, el mencionado jardín y un aparcamiento subterráneo para 300 coches. Visto desde el suelo, el pabellón parece una estructura estéticamente agradable con paredes de cristal. Visto desde arriba, impresiona por su tejado cubierto de vegetación. Curiosamente, las plantas trepadoras del jardín subtropical se extienden hasta el aparcamiento subterráneo. De este modo, se ha creado un jardín vertical.
En el parque, el agua que riega las plantas circula en un circuito cerrado. El agua de lluvia que cae sobre el tejado de la cercana ópera se transporta por tuberías hasta depósitos subterráneos. El pabellón del parque obtiene su energía de paneles solares montados en el mismo tejado. Las pasarelas de grava recogen el exceso de agua bajo tierra. Por supuesto, el pabellón también recoge el agua de lluvia a través de su tejado verde. Además, los elementos del parque están hechos de materiales reciclables. A su vez, la plataforma sobre la que se asienta el parque está construida de tal forma que evita inundaciones.
Opera Park no es sólo un oasis de verdor, sino también un brillante ejemplo de diseño ecológico. Como puede verse, la funcionalidad también va de la mano de la naturaleza. El aparcamiento, el jardín o la cafetería servirán al público de la ópera y a cualquiera que se acerque a esta zona de Copenhague en constante expansión.
Fotos: Francisco Tirado
Fuente: Cobe
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