La demolición, o más concretamente el derribo del chalet, se llevó a cabo en la mañana del sábado 2 de marzo. El propietario no disponía de permiso para las obras de demolición. El edificio está protegido por la ley. El inversor se enfrenta a una cuantiosa multa.
Los vecinos alertaron a la policía de los trabajos de demolición en la mañana del sábado 2 de marzo.
Alrededor de las 9 de la mañana recibimos una denuncia de un transeúnte que se percató de que se estaba demoliendo este chalet. Los agentes de policía acudieron al lugar, cuando ya se encontraban en la zona, por desgracia, pero este chalet ya estaba prácticamente demolido por completo. Encontraron a dos personas en el lugar: el operador de la excavadora y la persona que le estaba ayudando. Interrogaron a ambos hombres. Resultó que estabanrealizando trabajos encargados por el propietario del edificio “, declaró Wojciech Jabłoński, jefe de prensa del comandante de policía de la ciudad de Wrocław.
Las obras se detuvieron de inmediato, pero cuando llegó la policía apenas quedaba nada del edificio. La villa de la avenida Kasprowicza de Karlowice, en Wrocław, tiene 120 años. El edificio está inscrito en el registro municipal de monumentos históricos, lo que significa que está protegido legalmente, y cualquier intervención en su tejido arquitectónico debe ser aprobada por el Conservador Provincial de Monumentos. La demolición no fue autorizada.
El inversor ya había previsto reconstruir el edificio, pero el Conservador Provincial de Monumentos no dio su consentimiento a dichas obras, por considerar que la ampliación y reconstrucción supondrían una reducción del valor arquitectónico de la estructura.
La villa se encuentra dentro del trazado urbano histórico de Karlovice. Además, estaba protegida por las disposiciones del plan de desarrollo local. El edificio es (era) un ejemplo de villa muy pintoresca de principios del siglo XX con una característica combinación de materiales. La casa se distinguía por su sótano de piedra, fachada enlucida, detalles de ladrillo y partes en entramado de madera.
Es necesario comprobar la situación formal y jurídica; si la demolición se llevó a cabo como construcción no autorizada, se tomarán las medidas oportunas, incluido el recurso a los artículos 108 y 110 de la Ley de protección y cuidado de los monumentos (infracciones y delitos contra los monumentos). Se ha avisado a la Policía y se enviarán notificaciones a la Fiscalía. Se trata de una pérdida irreparable e irreversible para el patrimonio cultural de Wrocław “, añade Daniel Gibski, Conservador Regional de Baja Silesia.
El lunes 4 de abril, la Oficina de Prensa del Ayuntamiento de Wrocław anunció que la ciudad había notificado a la Fiscalía del Distrito de Wrocław – Psie Pole la posibilidad de que se hubiera cometido un delito. En la carta, la ciudad indicaba que no había encontrado ningún documento que demostrara la legalidad de las obras de demolición. Ni el Conservador Provincial de Monumentos ni el Inspector de Control de la Construcción del Distrito habían dado su consentimiento. Tampoco el Ayuntamiento de Wrocław había expedido un permiso de demolición.
Afortunadamente, Karłowice salió casi ilesa de la terrible conflagración que asoló nuestra ciudad en 1945. Resultaaún más doloroso que en el siglo XXI alguien, en nombre del lucro, consiga hacer con una excavadora lo que el totalitarismo no consiguió hace casi 80 años “, escribe en Facebook Jakub Mazur, teniente de alcalde de Wrocław.
Destruir un monumento puede suponer un severo castigo de hasta 8 años de cárcel. Los tribunales también pueden ordenar la reconstrucción del edificio e imponer una sanción económica correspondiente al valor del monumento.
fotos: Osiedle Karłowice Różanka Wrocław
fuente: Ayuntamiento de Wrocław, Conservador de monumentos de la voivodía de Baja Silesia
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