El edificio de la Oficina de Correos nº 1 de la calle Krasińskiego se construyó en la década de 1920 y ha estado asociado a la oficina de correos desde sus inicios. El edificio tiene nada menos que 11 plantas y se considera el primer rascacielos construido en la capital de la Baja Silesia. Hoy en día su tamaño ya no impresiona a nadie, pero en su momento la construcción de este edificio fue todo un acontecimiento. Representa el estilo del expresionismo del ladrillo del norte de Alemania.
La construcción del edificio, diseñado por el arquitecto alemán Lothar Neumann, comenzó en 1926 y finalizó tres años más tarde. Se construyó en el emplazamiento de un antiguo cementerio militar.
El edificio de correos en una postal de la década de 1930. Fuente: Museo Municipal de Wrocław
El terreno empapado no era muy adecuado para la construcción de un inmueble tan grandioso, por lo que las obras comenzaron fijando 1.700 pilotes de hormigón en el suelo para sostener el enorme edificio. El edificio tiene 43 m de altura en la sección de la torre y el cuerpo de 20 m de alto y 16 m de ancho tiene 142 m de largo. La superficie es de más de 3.000.000 de metros cuadrados. En un principio, los habitantes de la ciudad no estaban de acuerdo con la altura de la torre, pero una vez terminada, el edificio causó una impresión electrizante. Su tamaño dominó el aspecto del suburbio de Oławski y el edificio se convirtió rápidamente en un nuevo símbolo de Wrocław. En aquella época albergaba la Oficina de Correos.
El edificio de Correos en 1936 y 2019. Fuente: Biblioteca Digital de la Universidad de Wrocław y Google Maps
Hay dos pasillos que conducen a los dos patios interiores, con vestíbulo, salón principal, comedor y sala de fumadores entre ellos. Estos últimos estaban decorados con pinturas que representaban escenas deportivas, obra de Bruno Walter. Las seis plantas del cuerpo albergaban principalmente oficinas, cuyos empleados podían relajarse en el jardín dispuesto en el tejado. La sección de la torre albergaba el vestíbulo principal de taquillas, así como una escalera con rejas de hierro forjado obra de Jaroslav Vonka. La fachada estaba revestida de ladrillos rojos oscuros y cantería, y decorada con bajorrelieves que representaban escenas de la vida de la burguesía, los estudiantes y los trabajadores, y cartelas que mostraban la evolución de Correos desde 1590 hasta 1928.
El edificio de Correos y los edificios adyacentes en 1936 y 2019. Fuente: Instituto Leo Baeck y Google Maps
Gracias a su robusta construcción, el edificio sobrevivió a la Segunda Guerra Mundial en relativo buen estado, aunque no se libró de los proyectiles y el fuego de artillería. Los edificios de sus inmediaciones desaparecieron, de modo que el edificio permaneció durante décadas con las paredes en blanco y los patios a la vista. Después de 1945, además de las unidades postales, sus muros albergaron, entre otros, la Escuela Superior de Agricultura y el Consejo Nacional de Distrito de Wrocław-Śródmieście. En los años siguientes, albergó las sucursales regionales de los centros de Correos de Polonia, los pisos del personal de los empleados postales, así como el Museo de Correos y Telecomunicaciones de Wrocław. Más recientemente, en las inmediaciones del edificio se construyó el complejo de apartamentos Ovo, que alberga, entre otros, el Hotel Hilton, contiguo al edificio de Correos. El barrio de edificios vuelve a imitar el trazado de antes de la guerra.
Este monumento único de la arquitectura alemana lleva años deteriorándose y necesita una renovación. A pesar de su abandono, sigue siendo uno de los edificios más característicos de Wrocław.
Fuente: polska-org.pl, miejscawewroclawiu.pl, tuwroclaw.com
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