Los judíos aparecieron en Konin hacia 1397. Formaron parte de la comunidad de Konin durante siglos, participando activamente en el desarrollo de la ciudad. Su existencia llegó a su fin con la ocupación de Konin por los alemanes, que tuvo lugar ya en septiembre de 1939. Fueron objeto de una represión inmediata: sus posesiones materiales fueron destruidas o requisadas, y la gente fue recluida en guetos. La comunidad judía de la ciudad dejó de existir, pero quedó un símbolo importante, que perdura hasta nuestros días: la sinagoga de Konin. El conservador de monumentos de la voivodía de Gran Polonia acaba de inscribir las policromías del interior de la antigua sinagoga de la calle Mickiewicza en el registro de monumentos muebles de la voivodía de Gran Polonia.
El procedimiento administrativo en este caso se inició a petición del propietario legal del objeto, es decir, la ciudad de Konin. Las pinturas del interior han sido inscritas individualmente en el registro de monumentos como obras de bellas artes. La inscripción incluía las pinturas policromadas de la sala de oración principal: en su pared oriental, en el baldaquino de la parte central de la sala y en las columnas que sostienen el baldaquino. La decisión es ahora jurídicamente vinculante.
Foto: Grzegorz Budnik/materiales de la Oficina Provincial de Protección de Monumentos de Poznań
La sinagoga de Konin fue erigida en 1832. Formaba parte del complejo que constituía el centro del barrio judío de la ciudad. En 1883, el edificio fue ampliado. Como consecuencia de las actividades bélicas durante la Segunda Guerra Mundial, quedó parcialmente destruida. En 1968, la sinagoga fue inscrita en el registro de monumentos inmuebles de la antigua provincia de Konin. En 1983-1988, la sinagoga se sometió a una renovación general y se adaptó como sucursal de la Biblioteca Pública Municipal. Desempeñó esta función hasta 2004. En años posteriores, pasó a manos privadas. Desde diciembre de 2020, la sinagoga pertenece a la ciudad de Konin. Como resultado de consultas públicas con los residentes de la ciudad, se tomó la decisión de utilizar el edificio para funciones bibliotecarias y culturales.
Hasta nuestros días, el interior del edificio ha conservado su decoración y mobiliario, incluidos los restos del Aron ha-kodesh (un armario de altar diseñado para guardar rodales), la bima (un podio con un atril en la sala principal de la sinagoga) y la decoración pictórica. El diseño pintado de la pared oriental de la sala de oración principal proporciona una especie de marco arquitectónico en la parte central, tradicionalmente ocupada por el armario del altar. Columnas de orden corintio pintadas de forma ilusionista sostienen una cornisa curvada en arcos de medio punto y triple punto. Los huecos de las ventanas también están decorados. En la parte superior, en el techo, hay una decoración pintada en forma de lambrequín. Las columnas del bema están jaspeadas, en las partes superiores ricamente decoradas con policromía que imita franjas de telas estampadas. Las paredes del baldaquino están decoradas con pinturas en forma de lambrequines. Las policromías son una parte valiosa de la decoración del edificio, que ahora se cuidará más y debidamente.
Fuente: materiales de la Oficina Provincial de Protección de Monumentos de Poznań
Leer también: Monumento | Arquitectura en Polonia | Arquitectura sacra | Konin | Pintura
