El proyecto fue elaborado por arquitectos del estudio Hiroshi Nakamura y NAP. La biblioteca oculta bajo tierra se construyó en la ciudad de Kisarazu, en Japón.Se creó como lugar para relajarse después del trabajo.
La biblioteca se construyó en una zona dominada por tierras de cultivo. La idea que guió a los arquitectos hacía referencia al lema que implica trabajar en el campo los días soleados y leer libros los lluviosos. Para las personas que dividen su tiempo de este modo se desarrolló el diseño del edificio.
La biblioteca se construyó en un rincón del campo de Kurkku, que pertenece a una empresa de producción agrícola. Es una zona que forma una pequeña colina, y debajo se almacenaban escombros de construcción. Los arquitectos decidieron revitalizar la zona para crear un lugar atractivo y verde que permitiera el contacto con la naturaleza de forma atractiva. Hay un estanque cerca, que realza visualmente toda la zona.
Los arquitectos no querían ocupar una zona de terreno destinada a la agricultura. La biblioteca que diseñaron estaba oculta bajo tierra.
Queríamos abrir una pequeña brecha en el terreno y crear un lugar tranquilo donde los agricultores pudieran descansar “, dicen los autores del proyecto.
La presencia del edificio aquí sólo queda patente por la inusual forma del lugar. Visto desde arriba, el objeto parece una gota de agua. La parte estrecha es como un pasillo que conduce al interior de la “gota”. Ésta, a su vez, está rodeada de arquitectura: un edificio y estanterías.
Al diseñar el edificio, los arquitectos prescindieron de las columnas portantes. En su lugar, la estructura se apoya en losas de hormigón, que en algunos lugares penetran en el interior y se convierten en un elemento decorativo. El suelo, las paredes y el techo están acabados en colores terrosos. De este modo, el interior parece conectar con la naturaleza.
La altura de la biblioteca varía en función de la pendiente del terreno. Algunas partes de la biblioteca tienen un techo bajo y habitaciones pequeñas en las que sólo caben niños. En la parte más profunda se creó una sala para talleres.
Las paredes de la sala más grande están decoradas con una enorme librería redondeada que llega hasta el techo. Bajo ella se han creado zonas para sentarse, dispuestas en semicírculo. El techo está coronado por una pequeña claraboya, a través de la cual se puede vislumbrar el cielo.
diseño: Hiroshi Nakamura & NAP(www.nakam.info/en)
fotografía: Koji Fujii / TOREAL
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