Su interior fue diseñado por arquitectos del estudio Loft Factory.El piso está situado en Wrocław, en el edificio de un antiguo hospital del siglo XVIII, que fue revitalizado y convertido en un edificio de apartamentos de lujo
– Nos resulta muy agradable diseñar en un entorno así “, sonríe Agata Kasprzyk-Olszewska, propietaria de Loft Factory. Haciendo honor a su nombre, el estudio está especializado en el interiorismo de edificios con historia, sobre todo postindustriales. Aquí, sin embargo, los arquitectos tuvieron la oportunidad única de abordar el espacio del hospital municipal más antiguo de Wrocław
Ladrillo con historia
Se trata de un lugar absolutamente único. El edificio principal del complejo se construyó hace más de 200 años como sede del Hospital Allerheiligen, u Hospital de Todos los Santos. El célebre arquitecto alemán Karl Gottfried Geissler le dio un llamativo aspecto neogótico, con fachadas de ladrillo ricamente decoradas y tejados empinados desde los que se disparan hacia el cielo esbeltas torrecillas
Además de las cualidades artísticas e históricas del edificio, su ubicación en el paseo de la Ciudad Vieja tiene un valor extraordinario. El lugar de las murallas defensivas fue ocupado en el siglo XIX por un parque extendido a lo largo del antiguo foso de la ciudad. Es un enclave verde en el corazón de la bulliciosa Wrocław. Al mismo tiempo, está cerca, entre otros, de la Ópera de Wrocław y el Foro Nacional de la Música, y no muy lejos de la Plaza del Mercado. Los alrededores están llenos de magníficas casas adosadas de principios del siglo XX
En el interior del revitalizado complejo también le espera una experiencia única. Hablamos de pasillos elegantemente acabados, luminosas escaleras y, por último pero no por ello menos importante, pisos de más de 4 metros de altura con enormes ventanas arqueadas. Incluso con una superficie compacta, estos grandes acristalamientos crean una sensación de amplitud excepcional. El efecto que se siente en persona es sencillamente espectacular
No es de extrañar que aquí decidiera comprar su pied-à-terre una mujer polaca con una exitosa carrera en el extranjero. Entregó el armazón del interior a los arquitectos de Loft Factory, pero sus expectativas eran muy claras. Cumplir sus expectativas exigió un compromiso considerable por parte de diseñadores y contratistas
Hierro forjado
¿Cuáles eran los deseos de la inversora? – Uno de los primeros era extraer los ladrillos históricos de debajo de la capa de yeso “, recuerda Agata Kasprzyk-Olszewska. – Sin embargo, la renovación, que llevó mucho tiempo y trabajo y fue realizada por una empresa especializada, dio excelentes resultados. Hoy vemos el ladrillo original en el techo , no una imitación “, subraya la arquitecta
La segunda cuestión importante fue la construcción del entresuelo. Aquí, el reto consistió en calcular la estructura de modo que, con suficiente capacidad de carga, no supusiera una carga excesiva para el propio edificio. Igualmente importante era adaptar su tamaño y forma al espacio del pequeño piso. – No queríamos sobrecargarlo”, dice el diseñador. La construcción de acero, con un marcado carácter de loft, fue realizada por Warszawski Kowalski
Las puertas correderas de metal y cristal, que ahora conectan el salón con el dormitorio, tienen el mismo rasgo estético. Se trata de una propuesta de los diseñadores. – Originalmente, las dos habitaciones estaban separadas por un muro. Abrirla con un pasillo ha añadido luz y aire al piso. También ha mejorado las proporciones del pequeño espacio con la impresionante altura interior”, añade Agata Kasprzyk-Olszewska
El diseño industrial encajaba con las directrices generales del propietario de que el piso tuviera un carácter crudo. De ahí los radiadores de acero lacado incoloro, el suelo de tablones aceitados, los rodapiés metálicos y la decoración de hormigón en los frentes de los armarios y la cocina. Tampoco es gratuito que el cuarto de baño esté totalmente revestido de microcemento, sólo interrumpido por toques de grifería muy técnica de latón cepillado (serie Vintage de Graff)
La fuerza del color
La planta baja principal consta de un salón con cocina americana, un dormitorio con una pequeña mesa de trabajo y un amplio armario, y un cuarto de baño. El entresuelo, por su parte, incluye una zona de dormitorio para invitados, una librería y un armario. La composición interior es ligera. Se basa en muebles y accesorios mínimos. Predominan las formas sencillas, aunque con vivos toques vintage, sobre todo en forma de sillas traídas por el propietario del norte de Europa
Con este telón de fondo, destacan los cuadros de Anna Mierzejewska, pintora polaca presente en galerías de Nueva York y amiga del inversor. Se pueden ver en el salón y en el dormitorio, mientras que un tercer lienzo (no visible en las fotos) se colocó en el entresuelo. Además, las mesas diseñadas por el escultor Jakub Biewald para la marca Perler Design tienen categoría de obra de arte. Estas obras acercan el piso a los orígenes del fenómeno loft, es decir, espacios postindustriales convertidos en estudios y viviendas de artistas
La yuxtaposición típica de los lofts del blanco con el antracita o el negro (por ejemplo, en el estampado a cuadros de la alfombra Samarth) se anima con el color rojo ladrillo del diseño del piso. Este color, presente en el techo, en los glifos de las ventanas exteriores y en los tejados visibles desde detrás de las ventanas, también une el interior con el entorno. Este tono puede verse, por ejemplo, en el sofá, el cabecero de la cama y las lámparas que iluminan el salón. Los apliques bicolores (naranja intenso y negro) son, después de las sillas, otros objetos sofisticados traídos aquí por la propia propietaria junto con un puñado de objetos personales. De este modo, el espacio del edificio histórico cuenta ahora su historia
Diseño interior y estilismo: Loft Factory, loft-factory.com
Fotografías: Stan Zajączkowski, zajaczkowski.eu
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