La casa adosada de Cracovia, cuyo interior fue diseñado por la arquitecta Karolina Michałkiewicz-Kasina, del estudio de diseño Lumé, es un espacio armonioso, tenue y estéticamente coherente que se creó para una familia joven con dos hijos.
El espacio influye mucho en cómo nos sentimos. En esta casa no hay lugar para elementos aleatorios. La base sutil se complementa con el cálido color oliva, que se intercala en casi todas las habitaciones. El proyecto se creó para una familia joven con dos hijos.
La casa adosada de 100 m2 en Cracovia consta de un espacio abierto en la planta baja y un espacio privado en la planta baja, donde se encuentran 4 habitaciones. En la planta baja, hay una cocina abierta en el centro, que se adapta al ritmo diario de los miembros de la familia. Las encimeras de conglomerado de la cocina son de Hoder. Los frentes de los muebles son superficies lisas de MDF y chapa de roble. También hay un acento de color en forma de oliva cálido en los frentes de los muebles y la pared.
El cuarto de baño principal de la primera planta es un auténtico oasis de descanso. El cuarto de baño incluye una zona de ducha, cuyo acabado es un azulejo estructurado con efecto de drapeado vertical. Además de la ducha, el cuarto de baño cuenta con una bañera exenta y dos lavabos suspendidos en una encimera de Corian blanco. Un enorme vestidor está diseñado para ocultar tras sus puertas la cocina, la caldera y la lavandería.
Sobre el estudio
Soy diseñadora de interiores por formación y experiencia. En el diseño de interiores combino mi experiencia y conocimientos con mi amor por el arte. Lo que más me gusta de mi trabajo es el contacto con la gente, porque cada interior que diseño es una historia de los sueños de alguien. En privado, soy cracoviana y aficionada a la montaña. Encontré mi fuerza femenina siendo madre y este papel me enseña humildad. Lo que me importa en el diseño de interiores es el espacio, la luz y el detalle. Sin embargo, el mayor valor de mi trabajo es la persona y el espacio de calidad creado para ella. En los interiores, me gusta la armonía y la elegancia discreta. Veo la belleza en la sencillez, los colores discretos, los materiales naturales y la artesanía. Me encanta el arte en los interiores en cualquiera de sus formas. Respeto y admiro el diseño atemporal. Diseño mezclando estilos y escuchando los gustos y necesidades de mis clientes. Ser interiorista es un reto, pero también una gran alegría” – se lee en https://lumestudio.pl/
fotos: Joanna Krowiranda / https://www.joannakrowiranda.com/
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